“El laberinto del fauno” nos sitúa en el año 1944, quinto año de paz, y cuenta el apasionante viaje de Ofelia (Ivana Baquero), una niña de 13 años que junto a su madre, Carmen (Ariadna Gil), convaleciente a causa de un avanzado estado de gestación, se traslada hasta un pequeño pueblo en el que se encuentra destacado Vidal (Sergi López), un cruel capitán del ejército franquista, nuevo marido de Carmen y por el que Ofelia no siente ningún afecto.
También ahí se halla el molino donde Vidal tiene su centro de operaciones; en él les aguardan Mercedes (Maribel Verdú), una joven que se encuentra a cargo de los demás miembros del servicio, y el doctor (Alex Angulo), que se hará cargo del delicado estado de salud de Carmen.
Una noche Ofelia descubre las ruinas de un laberinto donde se encuentra con un fauno (Doug Jones), una extraña criatura que le hace una increíble revelación: Ofelia es en realidad una princesa, última de su estirpe, a la que los suyos llevan mucho tiempo esperando. Para poder regresar a su mágico reino, la niña deberá enfrentarse a tres pruebas antes de la luna llena. En el transcurso de esta misión, fantasía y realidad se abrazan para dar rienda suelta a una maravillosa historia donde la magia que rodea a Ofelia nos transporta a un universo único, lleno de aventuras y cargado de emoción.
Segunda incursión del hollywoodiense director mexicano Guillermo del Toro en la Guerra Civil española tras "El espinazo del Diablo" en la que la fantasía y el fascismo toman los papeles protagonistas en una película en que la mezcla de realismo y ficción no deja sensación de verosimilitud alguna al no tratar concienzudamente ninguna de las dos vertientes. La violencia militar ahoga la esperable inocencia infantil creyente en mundos maravillosos, y el mensaje reivindicativo se pierde ante la aparición de estrambóticos y horribles monstruos pseudomitológicos de látex.
Destacando por supuesto la efectividad técnica y creativa de la cinta, entre los actores sobresale un gran Sergi Lopez que borda su ingrato papel de capitán del ejército franquista.
Estamos, en resumen, ante una película para aficionados al género fantástico que busquen pasar un rato entretenido entre seres extraordinarios, pues estos serán lo más extra-ordinario del filme.
3 comentarios:
"El laberinto del Fauno", una de las películas que más bombo ha tenido en lo que llevamos de año.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, Elros, en la buena interpretación de Sergi López y en que la película es una combinación entre fantasía y realidad. Y también, muy probablemente,en que vaya dirigida, principalmente y por la imagen que se ha dado de ella, a un público amante de lo fantástico, género siempre atrayente, silenciando algo más la otra parte del filme, la represión franquista.
Creo que el mensaje que quiere transmitir Guillermo del Toro es claro: los niños, inocentes, no pueden sobrevivir o soportar estas circunstancias opresoras (en este caso se habla del franquismo, pero podía haberse tratado de cualquier otro régimen represor) si no es sumergiéndose en un mundo fantástico, lleno de hadas y seres maravillosos. Esa es la única manera de escapar de la dura realidad e intentar ser feliz, el único ancla. Así, ella morirá pensando que es una princesa.
El problema de la película radica, en mi opinión,en el tratamiento y el ritmo. Son algo desproporcionados: al comienzo se presta demasiada atención al lado fantástico y acaba chirriando un poco, después, poco a poco se va nivelando y todo se hace más coherente. Aún así, el uno por el otro, la gran historia que podría ser la parte histórica queda algo blandengue y supeditada a lo fantástico. Es lo mismo que cuando dices que "la mezcla de realismo y ficción no deja sensación de verosimilitud alguna al no tratar concienzudamente ninguna de las dos vertientes". Aunque pienso que tampoco se persigue la verosimilitud.
En resumen, creo que es una buena película (***), y que lo fundamental y que no debe caer en saco roto es el mensaje que esconde.
Puede que el problema esté (y no he visto la peli) en que el mundo que se construye la niña no es sólo irreal, sino que es una irrealidad irreal, o sea, una que ninguna niña de esa época y esas circunstancias se construiría, lejos de la cultura popular infantil efectiva de esa época y lugar. O sea, que se construye la niña las imaginaciones del director, no de una niña... y de ahí resulta un cortocircuito. En cualquier caso, al margen de que funcione o no, es interesante la idea de tratar la guerra civil más allá de las convenciones del realismo estricto, otra cosa será si resulta o no en este caso concreto.
Coincido contigo, Ireth, casi en la totalidad de tu exposición; mas a mí me gustaría pensar que en una película donde se alterna fantasía e Historia al menos los hechos históricos van a ser tratados con verosimilitud, y más teniendo en cuenta que el director ha presumido de ello.
Es una buena teoría José Ángel... y además en este caso nadie puede dudar que si de algo anda sobrado Guillermo del Toro es de imaginaciones.
Recuerdo además que en una entrevista explicaba que con la película quería exponer la figura del fascista como la de un monstruo más, en realidad como la del verdadero monstruo de la historia, al considerar que fuera de la imaginación para él el fascismo era la mayor monstruosidad de nuestro tiempo.
En fin, la película puede gustar o no, pero las interpretaciones que se le pueden dar son infinitas.
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